En momentos de crisis, se hace urgente tomar medidas para que los Estados recuperen los recursos que son fugados por medio de los distintos canales que facilitan la existencia de los Flujos Financieros Ilícitos (FFI).
El presente estudio intenta dar una aproximación de los montos que se pierden mediante lo que constituye la principal fuente de FFI en Perú: la falsa facturación comercial, y cómo es afectada la capacidad del Estado de dar respuesta a la pandemia y de garantizar los derechos humanos.