> Skip to main content

Gestión, sostenibilidad y justicia de la deuda

El problema

Una crisis de deuda en el Sur Global ya no es un riesgo, sino una realidad muy tangible. En muchos países, el aumento de los pagos de la deuda está paralizando la capacidad de los gobiernos para proporcionar servicios públicos esenciales y hacer frente a la crisis climática. Según un informe de Debt Service Watch, el servicio de la deuda, incluidos los pagos de la deuda interna y externa, está absorbiendo en promedio el 38% del ingreso presupuestario y el 30% del gasto en todo el Sur, cifra que se eleva al 54% del ingreso y al 40% del gasto en África. Estas cifras equivalen a más del doble de los niveles a los que se enfrentaban los países de ingreso bajo antes de la iniciativa para la reducción de la deuda de los países pobres muy endeudados (PPME) y la Iniciativa Multilteral de Alivio de la Deuda (MDRI, por su sigla en inglés). Por lo tanto, esta ya es la peor crisis de deuda que ha existido en el mundo.

Para concocer más, consulte el informe resumido

Read More

Frente a esta realidad, que afecta día a día el bienestar y los derechos de las personas, las instituciones financieras internacionales observan los problemas estructurales de deuda soberana que enfrentan muchos países como si se tratara de un mero problema de liquidez, ya que no se ha producido la serie de incumplimientos que algunos pronosticaron tras la pandemia de Covid-19. La realidad es que los países del Sur Global están haciendo lo que sea necesario para seguir pagando sus deudas, incluso si es mediante la implementación de medidas de austeridad draconianas, en muchos casos siguiendo las condiciones y el asesoramiento del Fondo Monetario Internacional (FMI). De hecho, los pagos del servicio de la deuda están ahogando el gasto público vital. El servicio de la deuda interna y externa equivale al gasto total combinado en educación, salud, protección social y clima en los países de ingreso bajo y medio, y lo supera en un 50% en África. Es 2,5 veces el gasto en educación, 4 veces el gasto en salud y 11 veces el gasto en protección social.

Mientras disminuyen los préstamos bilaterales y privados, los bancos multilaterales de desarrollo y el FMI están aumentando sus préstamos. Al no haber ningún otro instrumento sobre la mesa, es probable que los préstamos multilaterales se utilicen para reembolsar a los acreedores privados, así como a los acreedores bilaterales como China. Como ya sucedió en el pasado, posiblemente en los próximos años aumenten los países que enfrentan problemas para pagar las deudas multilaterales. Esto es problemático dado que ni el FMI, ni el Banco Mundial ni otros bancos multilaterales de desarrollo (BMD) participan en las reestructuraciones de la deuda. Además, a medida que los países recurran cada vez más al FMI y a los bancos multilaterales de desarrollo en busca de apoyo financiero, tendrán que aceptar las condicionalidades impuestas por estas instituciones, que siguen centradas en la consolidación fiscal (incluidos los recortes del gasto público y la fiscalidad regresiva, entre otras medidas) y las soluciones de mercado (incluida la promoción de las asociaciones público-privadas y la desregulación), lo que limita aún más la inversión pública para avanzar en los ODS, abordar las desigualdades de género o tomar medidas en materia de clima.

Economic Justice for all project

The change we need

Es urgente actuar ahora.

Respaldamos plenamente el documento final del Encuentro sobre deuda liderado por el Sur de las Organizaciones de la Sociedad Civil382, adoptada en Bogotá el 21 de septiembre de 2023, y exhortamos a los gobiernos a tomar medidas y cumplir con las exigencias de la Declaración.

Además, hacemos un llamamiento a los gobiernos para:

  • Garantizar la cancelación inmediata e incondicional de todas las deudas insostenibles e ilegítimas, para todos los países necesitados, por parte de todos los acreedores.
  • Crear un marco multilateral permanente de resolución de la deuda soberana que, bajo los auspicios de las Naciones Unidas, garantice la primacía de los derechos humanos sobre el servicio de la deuda y un enfoque basado en normas para la solución ordenada, justa, transparente y duradera de la crisis de la deuda, en un proceso que convoque a todos los acreedores.
  • Establecer un mecanismo automático para una moratoria del pago de la deuda y una reestructuración integral, oportuna y ordenada de la deuda luego de shocks catastróficos
  • Acordar principios comunes y vinculantes sobre endeudamiento y préstamo responsable, así como garantizar su cumplimiento
  • Acordar indicadores de vulnerabilidad multidimensional y promover una revisión abierta como enfoque para la sostenibilidad de la deuda, bajo la orientación de las Naciones Unidas y con la participación de la sociedad civil, con el fin de incorporar las vulnerabilidades, los riesgos e impactos climáticos y las evaluaciones de impacto en los derechos humanos y el desarrollo.
  • Poner en marcha mecanismos y procesos genuinos, participativos e inclusivos de transparencia y rendición de cuentas de la deuda, que permitan el acceso a la información sobre la gestión y las renegociaciones de la deuda, e incluyan el establecimiento de un registro mundial de transparencia de la deuda pública, con normas obligatorias que exijan a todos los prestamistas y prestatarios que divulguen información sobre préstamos y otros instrumentos de creación de deuda.
  • Poner en marcha auditorías oficiales de la deuda participativas y transparentes para examinar el endeudamiento y sentar las bases para la suspensión y cancelación de préstamos que: carezcan de consulta pública; indiquen prácticas cuestionables o fraudulentas; hayan dado lugar a violaciones de los derechos humanos; hayan contribuido a la destrucción del medio ambiente y a crisis climática
  • Abordar la necesidad de rendición de cuentas, transparencia y una mayor regulación de las agencias de calificación crediticia (CRA, por su sigla en inglés), incluida la corrección de los impactos adversos de las agencias de calificación crediticia en el financiamiento para el desarrollo y la exploración de la creación de agencias de calificación crediticia de propiedad pública.
  • Asegurar que los mecanismos de financiamiento y las políticas de gestión y resolución de la deuda incorporen sistemáticamente evaluaciones de impacto de género, poniendo la igualdad de género y los derechos de las mujeres por encima de los reclamos de los acreedores.
  • Acordar la cancelación de deudas insostenibles e ilegítimas generadas por proyectos de combustibles fósiles.
Economic Justice for all project in Ecuador

Taking action

Civil Society Organisations in the debt justice movement have a strong vision for turning inequalities around through a fairer global system. This vision is worked out through:

Advocacy

We intervene in international fora such as UN and International Financial Institutions meetings, meet one-on-one to talk debt-related issues with decision makers, share our research and aim to convince those with the power to make system changes. We organise campaigns, online and street actions to promote our calls and collaborate to strengthen the debt movements worldwide.

Awareness-raising

Who wants to hear about complex debt architecture? The realities of this unjust international financial system are hidden behind layers of complexity, dull accounting and poor transparency. We help the general public understand the glaring consequences of this foggy system. Getting attention to the issues through conventional and social media helps turn the tide in public opinion and put pressure on decision-makers.

Research and analysis

We bring together CSOs from across the world, share information, carry out joint actions, and raise stronger voices together. We also build connections with other sectors, showing the ways that debt justice can be transformative for achieving goals for poverty alleviation, gender justice, climate action and more.

Coordination

We bring together CSOs from across the world share information, carry out joint actions, and raise stronger voices together. We also build connections with other sectors, showing the ways that tax justice can be transformative for achieving goals for poverty alleviation, gender justice, climate action and more.

The movement

The partners in this project work within broader networks that bring together a wide range of CSO voices in the fight for debt justice:

An open convening space for civil society organisations and social movements that organise campaign actions on debt justice and debt cancellation. The space coordinates the annual Global Week of Action for Debt Cancellation campaign. This convening space also serves as a dedicated space for organisations and networks supporting its principles and calls.
An open civil society platform of over 950 members. The group exists to facilitate broad CSO participation in all of the United Nation’s Financing for Development meetings, with the aim to promote democratic global economic governance that works in the interest of people and planet.
An extensive arena for networking, strategizing and alliance building on issues related to Financing for Development, bringing a feminist and women’s rights perspective to the discussions.